Los fisioterapeutas somos los profesionales encargados de tratar todo tipo de tejidos del cuerpo humano. Sin embargo, muchas veces la primera barrera de defensa con la que contamos, es decir, la piel; se deja de lado.
En Clínica Vensal hemos recibido la formación necesaria para:
Tratar disfunciones y patologías de cada una de las capas dérmicas
Tratar el tejido celular subcutáneo (la grasa), es decir, el sistema tegumentario.

Acelera el metabolismo.
Drena y estimula el sistema linfático y cisculatorio.
Limpia de impurezas y toxinas.
Reoxigena y nutre las células.
Rompe las fibrosis. Esto es muy interesante de cara al tratamiento de cicatrices.
Estimula la producción de colágeno de calidad.
Activa todo tipo de fibras musculares.
Aumenta la tonicidad y disminuye la flacidez muscular.
Estimula la circulación sanguínea.
Ayuda a que los productos cosméticos utilizados durante el tratamiento penetren mejor.
Activa todo tipo de fibras musculares.
Aumenta la tonicidad y disminuye la flacidez muscular.
Estimula la circulación sanguínea.
Ayuda a que los productos cosméticos utilizados durante el tratamiento penetren mejor.
Reducción de grasa localizada y de celulitis.
Piel más tersa y luminosa.
Disminución de arrugas y líneas de expresión.
Reducción de las bolsas de los ojos.
Reduce las marcas en la cara y cuerpo.
Reafirma la piel y reduce la flacidez.